viernes, 16 de diciembre de 2011

La Vega Baja quiere recuperar el cultivo de Cañamo

La iniciativa parte de la Organización agraria ASAJA y la universidad Miguel Hernández de Elche. Uno de los principales impulsores de este proyecto es el profesor Joaquín Parra que pretende devolver a la vega los cultivos que tradicionalmente se llevaban a cabo en esta zona.

Esta iniciativa, es la segunda reintroducción de especies olvidadas en esta comarca. El Algodón también fue reintroducido en la agricultura local y así muchas personas han podido conservar sus empleos que de otra forma hubieran perdido, gracias a la fuerte crisis que esta sufriendo el sector agrícola en este momento.

Los agricultores se quejan de que otros cultivos como el melón, que se han cultivado hasta ahora, no tienen tanta salida comercial como el cáñamo textil y que si pudieran cambiarían gran parte de sus cultivos por otros mas rentables como es el cáñamo o el algodón.

El cultivo de Cáñamo es laborioso y es en grán parte mecanizado, pero aun así, el cultivo de cáñamo generaría en esta comarca numerosos puestos de empleo.

De momento han cultivado 1 hectárea “para probar” en este proyecto experimental, pero, el futuro del cáñamo textil en esta zona, depende de la rentabilidad que se obtenga de él. Los agricultores afirman que pronto podríamos ver inundados de esta planta toda la zona de la Vega Baja, ya que se puede aprovechar todo de ella. Del cáñamo se puede extraer la fibra para la industria textil, pero también se pueden aprovechar las demás partes de la planta para la industria cosmética, perfumería, alimentación, construcción, y fabricar biomasa, lo que podría proporcionar energías sustitutivas a los combustibles fósiles, gracias a agro combustibles líquidos (como el biodiésel o el bioetanol),

En Francia, el terreno cultivado de Cáñamo textil es aproximadamente 12000 hectáreas y el beneficio que se obtiene es considerable.

Las fibras obtenidas en este cultivo experimental, serán trabajadas y estudiadas por el Museo del Cáñamo de Callosa y por la Asociación La Gramera de Redován, ambas entidades son las encargadas de mantener la tradición del cáñamo industrial en la zona de la Vega Baja, llegando a existir incluso, una escuela de trabajos del Cáñamo en Callosa.

Javier Pérez, el Alcalde de Callosa de Segura, esta muy contento por la plantación experimental de cáñamo y asegura que servirá para mantener las actividades del museo del cáñamo y la escuela de trabajos del cáñamo. A su vez Roque Albert, el fundador del museo del Cáñamo de Callosa de Segura se ve muy ilusionado por la recuperación de la cultura del Cáñamo en la zona y esta muy satisfecho por la siega cultural que se ha llevado a cabo con motivo del 25 aniversario del Museo y la Escuela del Cañamo de Callosa de Segura.

Nos recuerdan que los cultivos de cáñamo, aunque sean para uso industrial, requieren permisos especiales de las autoridades y de las fuerzas de seguridad, para de esta forma, evitar que las plantas sean destinadas a hacer hachis, aunque es evidente que las variedades de marihuana cultivadas y destinadas al uso textil, contienen un porcentaje mucho menor de THC y por tanto son variedades homologadas y legales.

Si por fin se consigue demostrar la rentabilidad de este cultivo de cáñamo, será un gran impulso en el sector agrícola de la zona de la Vega Baja



Fuente: Blog marihuana

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